Un hecho que evidencia la precariedad de la asistencia social y la ayuda paupérrima del Estado a la niñez en Colombia fue denunciado a Zona Cero por docentes de la Institución Educativa Técnica Agropecuaria, sede 3, en la vereda Socavón, corregimiento de Los Pendales, en comprensión del municipio de Luruaco, Atlántico.

Muy alejado de las instancias gubernamentales y el aire acondicionado de las oficinas de las entidades que deben velar por la niñez (Secretaría de Educación, ICBF, Ministerio de Educación) está la pobreza extrema que se evidencia en lo que cualquier burócrata llamaría  “comedor infantil”.

En la Institución Educativa Técnica Agropecuaria hay 48 niños con edades que oscilan entre los 7 y los 13 años de edad. Cursan entre transición y quinto de primaria. Son atendidos por la Fundación Fundasalud.

[[nid:45307]]

La ración de alimentos es muy pequeña. El viernes al mediodía la porción de carne molida fue una cucharada, el arroz se midió con un pocillo pequeño, una miniatura de roscón y la ensalada parecía una degustación de supermercado. De remate no hubo líquido. Debieron pasar la pequeña ración “a palo seco”. Y como en Socavón no hay acueducto, solo toman el líquido que llevan a la localidad en carrotanques.

La profesora Diana Canabal cuestionó la “poca alimentación para los niños”.

“Es lo único con lo que cuentan porque en su casa no encuentran comida” dijo. Ante los ojos de la educadora estaban los 48 niños en el espacio asignado como comedor.

Hay “sentados 16 y los demás 32 están en el suelo porque las sillas no son suficientes”. Y peor, las 16 sillas que existen son demasiado pequeñas para los niños privilegiados que tienen acceso a un puesto.